Disfruta de ti al máximo con el desarrollo personal
Así que quieres dedicar tiempo a tu desarrollo personal. ¡Gran idea! ¿Pero por qué? ¿Y por dónde empiezas? Probablemente ya estés trabajando en tu desarrollo personal todos los días a nivel subconsciente. Una vez que comiences a hacerlo conscientemente y establezcas algunas metas, podrás progresar aún más.
¿Qué es el desarrollo personal?
El desarrollo personal se trata de la evolución de tu identidad, tu talento, tu potencial y la realización de tus sueños. El desarrollo personal comienza en la niñez y continúa durante toda tu vida. Se basa, por ejemplo, en generar confianza, mejorar tu salud física o desarrollar un talento. Puedes hacerlo conscientemente leyendo un libro sobre psicología, meditando o practicando una habilidad (como tocar el piano) todos los días. Pero también evolucionas de forma subconsciente, por ejemplo, cuando tienes una buena conversación con un amigo o un familiar.
Desarrollo personal en la época de Aristóteles
¿Toda esta atención al desarrollo personal es una nueva tendencia? Por supuesto que no. El conocido filósofo Aristóteles, que vivió en la antigua Grecia, pensaba en el desarrollo personal unos siglos antes de Cristo. Lo definió como "sabiduría práctica". Quien lo practicaba llegaría a la "eudaimonia", que puede traducirse como "felicidad" pero también como "el florecimiento del hombre". Y no estaba solo: personas de todo el mundo han pensado en el desarrollo individual de las personas durante siglos.
¿Por qué deberías invertir en tu desarrollo personal?
¿Se supone que todos debemos comprar libros de autoayuda e inscribirnos en clases de yoga? No te vamos a decir qué hacer, cada persona tiene sus preferencias, pero te diremos que: si dedicas tiempo y esfuerzo al desarrollo personal, verás los resultados. Te conocerás más y serás más consciente de ti mismo. Si te paras a analizar tus acciones, comenzarás a tener momentos en los que pensarás: "¡Oh, siempre hago esto!" Te darás cuenta de cómo lidias automáticamente con ciertas situaciones. Al reflexionar sobre esos momentos, podrás reconocer la situación la próxima vez que suceda y elegir cómo reaccionar. Además, la autoconciencia va de la mano de la confianza. Piénsalo: si sabes que eres bueno presentando, te sentirás mucho más seguro hablando delante de un grupo de personas que si creyeras que eres terrible en eso. Al conocerte a ti mismo, descubrirás qué cualidades posee. Una vez que las sepa, podrás utilizarlas de forma más precisa y eficaz. ¡Y eso te hará sentir genial! La autoconciencia te ayudará a sentirte más seguro de tu propia piel.
El equilibrio entre el desarrollo personal y la aceptación
Es importante recordar que el desarrollo personal es un equilibrio entre el crecimiento y la autoaceptación. Por un lado, quieres desarrollarte y sacar el máximo partido de ti mismo. Por otro lado, es bueno saber cuándo es suficiente. A veces es mejor aceptar la situación actual tal como es, sin tener que cambiar nada en absoluto. Por lo tanto, es importante seguir preguntándonos qué estás haciendo y por qué lo estás haciendo.
Trabajando en el desarrollo personal con metas
¿Estás preparado para desarrollar tu confianza, evolucionar y realizar tus sueños? Entonces, ¡descubre cómo trabajar tu desarrollo personal! No tienes que conseguir un coach caro o leer un sinfín de libros de autoayuda. Puedes comenzar hoy con unos sencillos pasos. El enfoque son las metas que te ayudarán con tu desarrollo personal.
El primer paso es la autorreflexión. Este es el momento perfecto para detenerse y sentar las bases adecuadas para tu plan. Básicamente, te estás investigando a ti mismo. ¿En qué eres bueno, cuáles son tus cualidades y habilidades? ¿Qué te resulta difícil? ¿Qué es lo que le gusta hacer? ¿De qué logros estás orgulloso? Puedes incluir tanto tu trabajo como tu vida privada. Escribe todo lo que se te ocurra, por ejemplo, en tu Vertellis Chapters. También puede ser útil hacerle algunas preguntas a algún amigo cercano o compañero.
A continuación, debes elegir un tema en el que centrarte. Dentro de este tema, vas a establecer una meta. Las metas te motivan a trabajar en el desarrollo personal. Asegúrate de que el objetivo sea concreto; sabrás para qué estás trabajando y cuándo lo has alcanzado. Estos son algunos ejemplos: Quiero completar un curso de fotografía antes de fin de año. O: Hablaré con dos clientes por semana para conocer mejor sus deseos y expectativas. Puedes utilizar el método SMART para establecer objetivos concretos y alcanzables. De acuerdo con este método, un objetivo debe ser específico (S), medible (M), aceptable (A), realista (R) y tener un punto de terminación (T).
Ya has marcado tu objetivo y sabes cómo quieres crecer. ¡Ahora es el momento de hacer un plan! En un plan de desarrollo personal anotas lo que quieres lograr y qué pasos darás para lograrlo. Este plan puede estar organizado por una semana, unos meses o varios años. Debes dividir un objetivo grande en varios más pequeños y anotar exactamente qué acciones tomarás y cuándo. Asegúrate de que el plan sea realista y esté dividido en pasos, para que puedas marcar cada paso que logras a medida que avanzas. ¡Esto te ayudará a mantenerte motivado para seguir trabajando en tus metas de desarrollo personal!
Tomarte el tiempo para desarrollarse
El desarrollo personal requiere tiempo. Sería genial si no fuera así; si pudiéramos establecer una meta hoy que podamos alcanzar mañana, y sentirnos inmediatamente una mejor persona. Pero, lamentablemente, no funciona de esa manera. Tómate el tiempo para hacerte preguntas, para descubrir qué es lo que realmente te importa, en qué áreas quieres crecer y cómo quieres lograr ese crecimiento. En el caos de la vida cotidiana, a veces nos olvidamos de detenernos y pensar. El desarrollo personal comienza con tomarse el tiempo para hacerse las preguntas correctas. Quién sabe: es posible que estés mucho más cerca de tu objetivo de lo que crees …